Leonardo Boff, a Podemos: "Nos merecemos una sociedad en la que todos y todas quepan"



(Leonardo Boff).- Queridos compañeros y compañeras: A pesar de estar físicamente lejos, estamos muy cerca de todos ustedes, porque caminamos en la misma ruta y en la misma dirección: construir un tipo de sociedad no existente todavía pero que, ciertamente, urge construir.

Este tipo de sociedad deberá estar a la altura de los retos que vive la humanidad en el presente, una humanidad que ha crecido con conciencia, que se siente ciudadanía planetaria y que rechaza las formas políticas dominantes, porque son formas restringidas que representan los intereses de pocos y no los de la mayoría de la población.

Nos merecemos una sociedad en la que todos y todas quepan. Y nos proponemos construirla, para que la mayoría sean agentes participativos de lo nuevo posible, donde se sitúe en el centro la vida humana, la vida de la naturaleza y la vida de la Madre Tierra.

Estamos hartos del desarrollo meramente material, porque no somos animales hambrientos. Queremos un desarrollo humano-espiritual que esté en armonía con todos, con el propio corazón, con las demás personas, con la naturaleza, con la gran Pachamama y también con la Suprema Realidad hecha de amor y ternura.


Estamos convencidos de que el paradigma civilizatorio vigente ya no nos puede proporcionar ningún horizonte de esperanza. Nos propone siempre más de lo mismo, algo que ya no funciona y que nos lleva a un camino sin retorno. Y queremos vivir y no sufrir.

Queremos, asimismo, valorar el trabajo como expresión de la creatividad humana y de la autorrealización, y que no continúe estando secuestrado por el capital como puro medio de producción.

Queremos entender la Tierra viva como nuestra Casa Común, tal como nos lo ha recordado, de manera tan profunda y bella, el Papa Francisco.

Queremos sentir y experimentar que todos los habitantes de esta Casa Común somos hermanos y hermanas que nos amamos, y que juntos podemos transformar la tragedia anunciada en una crisis purificadora.

Esta crisis nos puede permitir un salto de calidad, un salto con rumbo a una sociedad en la cual sea menos difícil amar, ser solidario, ser compasivo y ser fraternal.

Queremos realizar el sueño ya anunciado en los años treinta del siglo pasado por ese gran precursor de un mundo nuevo: el palentólogo, teólogo, místico y jesuita Pierre Teilhard de Chardin: «El tiempo de las naciones pasó. Importa ahora construir la Tierra».

Desde España, Grecia, Portugal, Brasil y desde todas las partes del mundo queremos construir esa Tierra de todos y para todos.
Hacia esta dirección confluyen las líneas de fuerza del proceso evolucionario y planetario.

Estamos predispuestos a ser agentes de esta nueva historia y de una nueva humanidad. Sabemos que pesan nubes negras sobre nuestra Madre Tierra capaces de producir grandes devastaciones. Pero creemos en las palabras del libro de la Sabiduría, en el cual el Creador de todas las cosas nos revela: «Amo todas las cosas que he creado y no odio ninguna. Las amo porque soy el soberano y apasionado amante de la vida». (Sab 11,26).

Un Dios, que es un apasionado amante de la vida, no permitirá que nuestra vida desaparezca de la faz de la Tierra. Vivimos para brillar porque este es el propósito del universo y el designio del Creador.

Unidos y hermanados por este sueño bueno, sigamos luchando y cantando porque hemos de triunfar.