Ante tanta información manipulada sobre Venezuela es bueno leer y difundir cartas como esta, bien documentadas y argumentadas.
Sr. Albert Rivera: le escribo esta carta después de haber leído en El Mundo su artículo “Un país rico arruinado por el populismo”. Y se la escribo en el avión mientras regreso de Tenerife a Madrid.
Le puedo asegurar que le escribo porque su manera de hacer política me merece respeto, aunque en este caso pienso que no hace justicia a lo que está pasando en la revolución bolivariana de Venezuela.
Parece que Vd. ha viajado a Venezuela del brazo , mayormente, de quienes están en la oposición. En su escrito –puntual, con referencia a casos particulares y a algunos colectivos-muestra fuerte adhesión y protesta por lo que están sufriendo muchos venezolanos. Y alude a opositores relevantes como gente demócrata y heroica, injustamente encarcelados. No ha visitado, al parecer, los grandes barrios, que cubren inmensas laderas, ni otros sectores de la población , que antes de la llegada de Chávez, sufrían el flagelo de la miseria, el hambre, el desempleo, la enfermedad, el analfabetismno, la desesperación, etc. en proporciones muy superiores a las que Vd. lamenta ocurrir ahora. También parece que no ha tenido tiempo para informarse o no le han contado lo que el comandante Chávez hizo en beneficio de las mayorías pobres en básicas dimensiones de la vida individual, familiar y social. No es cosa baladí y le hubiera servido conocer y narrar algunos de los logros comprobados y publicados por organismo oficiales , tales como la ONU, la UNESCO, la FAO, etc.
Su visita hubiera podido, si no analizar y valorar en detalle el desarrollo de estos últimos quince años, no ignorarlo para relacionar este breve período con el largo de los 70 años anteriores y asegurar la veracidad de su valoración.
Lograr que la escolarización pasase en tan pocos años de 6 a 13 millones; que las universidades se duplicasen siendo Venezuela el quinto país con más alto número de universitarios; que los profesores pasasen de 65.000 a 350.000; que la reducción de la pobreza pasase de un 49,4 % a un 27,8 %; que las personas que recibían pensión pasasen de 387.000 a 2.100.000; que los médicos por cada 10.000 habitantes pasasen de 18 a 58; que el incremento de calorías se incrementase hasta un 50 %; que el salario mínimo pasase de 16 $ (100 bolívares) a 320 $ (2.000 bolívares); que el índice de desigualdad fuera en Venezuela el más bajo de la región latinoamericana (según el coeficiente de Gini); que se hayan entregado más de 900.000 viviendas, etc., etc. son datos indispensables, para no hablar infundadamente de un país arruinado por el “populismo” chavista.
Hasta 2012, Chávez ganó democráticamente todas las elecciones , menos una. Y fue en las de 2012, en que la oposición, unida toda ella, pensó que por las urnas iba a ganar,cuando también la perdió por unos tres millones de votos. A partir de ahí, al ver que no lograban la victoria via urnas , optaron po la via violenta desestabilizadora.
Le hubiera servido haber llegado a Venezuela teniendo descifrado el por qué y el por quiénes se producía el desabastecimiento de los mercados, las colas, las movilizaciones callejeras con maltratos, saqueos, incluso muertes y estar alertado contra la infamia de decenas y decenas de fotos, tomadas en otros países y atribuídas cínicamente a la represión del Gobierno chavista.
Un buen político sabe que nada ocurre al azar y, ante los males y desastres que Vd. nos cuenta, hay que extremar el análisis para captar las causas y causantes de los mismos. He estado en varios países de nuestra querida “Patria grande”, he estado en Venezuela y pude comprobar los progresos llevados a cabo por los populistas Chávez y Maduro.
Me temo que Vd. No se ha detenido a verificar la biografía del llamado héroe demócrata Leopoldo López. Una investigación en este caso es necesaria –encontrará escritos rigurosos sobre él- y nos serviría publicase el resultado de la misma.
Me resula extraño que en su artículo no haga ni siquiera mención del papel que juega en todo este drama la realpolitik de Estados Unidos. Aparte el gobierno chavista de Maduro, se lo explicarían de maravilla otros gobiernos de la región.
Hay textos de políticos de Estados Unidos verdaderamente emblemáticos a este respecto.El presidente Obama piensa en otra dirección y no los comparte, pero como ya se ha dicho, Obama en muchas cuestiones tiene el cargo pero no el poder. No obstante , le transcribo , por si le sugiere algo, este texto del supeconocido estadounidense Noam Chomsky: “Cuando en nuestras posesiones se cuestiona la quinta libertad (la libertad de saquear y explotar), los Estados Unidos suelen recurrir a la subversión, al terror o a la agresión directa para restaurarla”.
Puede imaginar lo que la oligarquía venezolana y la especial de Estados Unidos con sus empresas y mercados multinacionales pudieron acumular durante tantos años antes del chavismo en riqueza y poder, en monopolios y privilegios y armarse de hábitos propietarios como señores, y le será fácil entender la tan recrudecida y violenta acometida de los héroes de la oposición. Pruebe Vd. a proponerles un cambio que rebaje sustancialmente su standar de vida para una distribución de la riqueza más ecuánime, que la haga pasar a los que siempre carecieron de ella. Y pregúntese por qué carecieron y quiénes mantuvieron esa carencia hasta llegar el militarote, payaso y populista Chávez.
¿Y por qué el Sr. Rajoy, y otros políticos de nuestro país, abanderados por famosos periódicos (entre ellos El País) vienen sosteniendo una campaña tan feroz contra el Chavismo? Averígüelo o hágaselo cantar a niños de pecho, que con absoluta llaneza se lo contarán. No obstante, mamelucos propietarios de bienes usurpados, tienen a gala darnos la luz : Vamos, invadimos y arrasamos, para que brille la estrella de la libertad, de la democracia, de los derechos humanos, de la igualdad y solidaridad entre unos pueblos y otros.
Comparto su sincero dolor y solidaridad por la situación actual de la revolución bolivariana (fue revolución, de lo contrario las cosas seguirían como antes), deseando que prosiga su cauce democrático en beneficio de todos.
Y un último detalle: casi seguro que muchos de estos honorables propietarios, cuidan mucho de aparecer como cristianos, muy religiosos ellos, y así obtener la bendición de lo alto, a través de prácticas religiosas de acá abajo, pero que en muy poco reflejan el Evangelio del Nazareno.
Con reconocimiento y sincera estima
Benjamín Forcano
D.N.I. 39614473 D